viernes, 30 de mayo de 2014

Mi experiencia

(“conoceréis la verdad y la verdad os hará libres”, San Juan 8:32)

Llevo un tiempo pensando en cómo plasmar una experiencia personal que hace unos meses atrás me aconteció. Trataré de ser lo más objetiva posible y a la par dejar zanjadas las interrogantes, en la medida que mis conocimientos me lo permitan:

 Antes que todo, me gustaría que tuvieran presente algo que a mí personalmente aún me toma trabajo comprender, pero es lo más fiel en cómo debe interpretarse el mundo: todo aquello que a Uds. les pasa externamente es un reflejo de Uds. mismos, aquel proceso también es interno, no hay absolutamente nada ajeno, todo es un espejo, todo el cosmos está dentro de Uds. mismos, una especie de uróboros.

 













De esta forma, las analogías son nuestro mejor aliado a la hora de comprendernos, los procesos del macrocosmos son equivalentes a nuestros procesos internos, en nuestro microcosmos. Sin  embargo, hay que ser en extremo cuidadoso, saber separar el trigo de la paja, lo verdadero de lo fantasioso.

También, antes de dar paso al relato en cuestión, quisiera mencionar que así como existen sensaciones con las que uno se conecta con el mundo externo, las sensaciones que reportan nuestros sentidos, también hay sensaciones internas alejadas de todo tipo de vínculo con la materia, son sensaciones complejas, elevadas, difíciles de transmitir en palabras, pues al utilizarlas debemos mediar con algo tangible para hacerlas comprensibles, lamentablemente esa traducción hace perder una parte importante del concepto en sí. Existe un mundo interno tan rico como el externo, existe un sentido para descubrirlo, sin embargo la sociedad occidental no nos da las herramientas para despertarlo.
 
Estaba un día tratando de saber exactamente quién era yo y empecé a quítarme las capas: sé que no soy mi cuerpo, es algo como pegado a mí, funciona solo, la respiración, su alimentación, entra y sale la materia según “él” lo requiera. Sé que no soy mi pensamiento, pues comprendí la marcada influencia que me dejaron los largos años de educación estatal, dudo incluso de algún pensamiento propio, siento que alguien más ya lo pensó, alguien en alguna parte del planeta “lo bajó del cielo” antes que yo. Sé que no soy mis emociones, ni mis deseos, ellos parecieran dominarme, lloro o río según la ocasión, es una especie de ente que se posesiona de mi cuerpo por aquel instante en una especie de catarsis. 
 
De pronto me vi sin forma, como un espíritu que vivifica, tanto lo material como lo inmaterial de mi “personalidad”, aun así sabía que tampoco aquello me representaba. Y así me la pasé todo el día y me fui con aquella duda a la cama, a dormir.
 
En algún momento de esa noche, sin que mediara ningún sueño, abrí repentinamente los ojos con el siguiente pensamiento en mi mente: “¡soy mi alma!”, inmediatamente cierro los ojos, como quien siente alivio al encontrar la respuesta a un intrincado problema existencial, y simultáneamente ocurren dos complejas sensaciones internas: primero, siento en mi pecho una especie de fusión, la sensación que experimentaría un trozo de mantequilla derritiéndose en una sartén y segundo: el sonido de un trueno, agudo, cortante como el mismo relámpago, el sonido me arrebata, me lleva de viaje, siento la vibración del viaje en todo mi cuerpo.

Aún permanezco con los ojos cerrados, la sensación de viaje es tan poderosa que se vuelve en extremo compleja, pues a la par que siento que viajo a los confines más recónditos del Universo, al centro mismo del Cosmos, también siento que el lugar es en extremo cercano, muy muy cerca. De pronto el trueno cesa y siento que estoy dentro de una cámara, la oscuridad misma y el silencio absoluto se funden en una sola sensación, no se escucha nada, ni respiración ni latir de corazón, nada, la cámara es hermética, sin embargo en aquella habitación me sé que sólo estoy yo. Es tan inesperado todo, tan rápido, que no atino a cómo reaccionar, así que sólo estoy atenta, a la espera que alguien entre. 
 
No puedo decirles cuánto tiempo transcurrió, nada había de referencia para tener una idea del tiempo. En eso estaba, expectante, a la espera, cuando nuevamente aquel trueno me arrebata de aquella cámara, otra vez de viaje, la misma sensación. Cuando cesa el sonido, escucho mi respiración, me sé de nuevo acostada en mi cama, abro los ojos y reconozco mi habitación, afuera aun es de noche y silencioso.
 
Ahora recapacitando, comprendo mi error, mi error fue esperar. Todo aquel día Minerva estuvo guiando mis pasos con los cuestionamientos, de pronto me sentía fuerte como Hércules a paso seguro de quien se sabe que hace lo correcto, con determinación, sólo era necesario ese último paso y en eso hace su aparición Mercurio, con aquel sonido de viaje cósmico, quien me arrebata hasta guiarme a esa cámara. Sí, el error fue esperar y adoptar la forma cúbica de aquella cámara, cuando en realidad debí yo forzarla a adoptar mi forma, mi forma de pureza incorruptible, la que contiene a todas las demás formas, la de una esfera.


lunes, 26 de mayo de 2014

El ánima de grandes ojos verdes


Sigiloso, impregnado de humo,
ronroneos dibujan un lirio etéreo,
se inmiscuye el calor a mi lecho,
el perfume anuncia al sueño.

Las formas poco me importan
en esta noche de luna ausente,
la infinitud del abismo nocturno
siempre a los párpados  vence.

Sensación que deshace las formas,
duerme, duerme, pequeña fiera,
¿infante humano  o quimera?.

Reposa tu corazoncito en mi pecho
aterciopelado manto de oro me liberas
de esta terca e ilusoria frontera.

viernes, 23 de mayo de 2014

Remember me

Con dolor aún en el corazón, una semana ya de la partida de mi abuela, mujer silenciosa, desconfiada, enigmática, ermitaña, mas siempre con su dibujada sonrisa. Recordando aquellos días más felices de mi infancia (y de mi vida quizás), donde todo queda tan hermosamente grabado por la dulce inocencia, sensaciones irrepetibles e imborrables, sólo mías, la libertad del campo y el contacto con la naturaleza, la simplicidad de un fogón y aquellas manos…ay, esas esculpidas manos! que se movían a cámara lenta frente a mis curiosos ojos, todo lo que ella tocaba me parecía mágico…cómo duele recordar tanta felicidad vivida, recordar esos días que no volverán…


 "Cuando yazga, yazga en la tierra, que mis errores
no causen molestia a tu pecho;
Recuérdame, pero ¡ah! olvida mi destino;
Recuérdame, recuérdame, pero ¡ah! olvida mi destino."

domingo, 11 de mayo de 2014

Día de la Madre

Los vedas (coloquialmente conocidos como los “harekrishnas”) llaman “madres” a todas las mujeres: casadas, solteras, jóvenes o niñas.

Curioso es que el “día de la madre” en Occidente, coincida con la celebración en los países orientales del nacimiento de Buda: la luna llena de Mayo. He aquí que el acto de “dar a luz” coincida con el de “iluminación”, nuestro vocabulario en lo físico y lo metafísico se entrecruza (conocimiento sabido desde la creación misma de las palabras que nos han sido legadas, para que cada uno según su capacidad de entendimiento, logre interpretar y llegar a lo más profundo).

Aquí la escultura al interior de una Iglesia en Zaragoza, representando la Asunción de la Virgen, en la vista lateral se aprecia mejor la forma de “cerebro” en la que se apoya la virgen. Nos da a entender aquello de la “concepción virginal”, como lo es el pensamiento (un pensamiento no se puede tocar): “He aquí que la Virgen concebirá y dará a luz un hijo y le pondrá por nombre Emmanuel, que significa Dios con nosotros”, (Mateo 1:23).

El conocimiento siempre estará velado (así como lo está el rostro de la novia cubierta con un velo), el trabajo de entendimiento debe ser personal, de otra forma se obtendrían personas rumiando una y otra vez palabras que no comprendería. La creación del concepto de divinidad debe ser un acto de transformación íntimo e individual, es lento, pero se va perfeccionando hasta el último día de nuestras vidas y tomando forma como la greda en las manos del alfarero.


sábado, 10 de mayo de 2014

Misticismo

“Misticismo: estado alterado de consciencia, el místico vive la unión con el todo, es una experiencia que ocurre más allá de las coordenadas del tiempo, del espacio, de la razón, del lenguaje, de los sentidos...está en todas las religiones, inclusive se da en personas agnósticas...es una experiencia gratuita, cualquier persona la puede obtener, no es necesario ser santo…”






“…el problema comunicativo de la experiencia mística, la soledad fundamental del místico que no puede comunicar lo que le aconteció, en palabras de María Zambrano: una soledad sin compañía posible, una soledad sin poros, una soledad incomunicable, que hace que la vida sepa a ceniza..."

“…La ciencia de hoy, la cuántica, la astrofísica, curiosamente tiene un lenguaje paralelo a la mística, sobre esto se está reflexionando mucho…”


https://www.youtube.com/watch?v=ugVq8k5JaPA


Es natural que Borges se sintiera atraído por los sufíes, ya que el sufismo produjo hombres que fueron no sólo grandes místicos sino también poetas. Persia es, quizá, el país que contó con más poetas místicos, inspirados por una profunda experiencia espiritual. - See more at: http://www.redislam.net/2012/11/la-mistica-sufi-en-las-obras-de-jorge.html#sthash.QDe5vEaE.dpuf
Es natural que Borges se sintiera atraído por los sufíes, ya que el sufismo produjo hombres que fueron no sólo grandes místicos sino también poetas. Persia es, quizá, el país que contó con más poetas místicos, inspirados por una profunda experiencia espiritual. - See more at: http://www.redislam.net/2012/11/la-mistica-sufi-en-las-obras-de-jorge.html#sthash.QDe5vEaE.dpuf“Misticismo: estado alterado de consciencia, el místico vive la unión con el todo, es una experiencia que ocurre más allá de las coordenadas del tiempo, del espacio, de la razón, del lenguaje, de los sentidos…está en todas las religiones, inclusive se da en personas agnósticas...es una experiencia gratuita, cualquier persona la puede obtener, no es necesario ser santo…”

martes, 6 de mayo de 2014

Luto forzado

Cerilla extinguida,
materia aglomerada en la oscuridad,
fue un secreto, ¡nadie supo!,
alguien esboza una mueca de alivio.

Fue la más bella de todas,
jamás notaron su existencia,
aquí las ventanas tienen rejas
y hermosas vistas hacia un muro.

La flor que abre en silencio,
cruza el umbral a la eternidad,
en este lado sólo la apaga la mirada
que exuda hiel de indiferencia.

La muerte y la vida usan la misma puerta,
el mismo perfume hace dormir y despertar,
ese es el encanto del mármol negro,
su reflejo, su reflejo, su reflejo…