("La Divina Madre Minerva, la Diosa de la Sabiduría y de la Justicia, es la
más Poderosa de todos los Dioses y de todas las Diosas. Lo que Ella
decide es la Voluntad del Padre Celestial Zeus-Júpiter, y siempre se
cumple")
Sabiendo que en el
plano existencial donde está anclada mi consciencia es una Ilusión, donde todo se crea y se destruye, mientras mi
Alma duerme plácidamente (todo cuanto puedo hacer, por ahora, es tocar algunas
canciones de cuna y leerle algunos cuentos), les pregunto: "¿qué pasará si la
despierto?".
Resulta que ayer
me desperté a media noche, estaba silencioso, y recordé que el día anterior había
descubierto mi esencia, que yo era mi Alma, que era indestructible, y ese
pensamiento me llevó a un estado de plenitud que no había sentido jamás, como
si mi corazón se fundiera con algo mayor. Justo en ese instante, sentí una
especie de zumbido que hizo vibrar mi cuerpo y luego una especie de trueno que
me transportaba y, al terminar aquel ruido, llegué a un lugar que supe que
estaba inconmensurablemente distante pero a la vez muy muy cercano. De pronto
estaba en una cámara oscura y silenciosa, pero era un silencio de esos
perfectos, no escuchaba mi respiración, NADA, absolutamente nada, sabía que
estaba en un lugar sagrado, pero no sabía dónde, me quedé ahí, inmóvil, esperando
saber qué pasaba. Pasaron unos segundos, quizás medio minuto, y volví a sentir
exactamente el mismo trueno que me volvía a transportar a la misma velocidad, de
pronto, volví a escuchar mi respiración, sabía que estaba de regreso en mi
casa, en mi cama.
Han de saber Uds.
que el Amor Divino es el que ha creado el Universo, a cambio de mantener a
todas las Almas durmiendo en un gran sueño, en el Gran Engaño. El equilibrio en
el Universo es perfecto, la Ilusión se mantiene mientras las fuerzas creadoras
se equiparan con las destructoras, un balance de fuerzas cohesionado sólo por
el Amor Divino, que es lo único que no se destruye JAMÁS, es indestructible al
igual que nuestra Alma.
También han de
saber Uds. que todo es una Unidad, todo es UNO, que nuestra esencia es la misma
para todos, todos somos iguales, desde la más primitiva ameba del fondo de los océanos
en el planetoide de alguna galaxia lejana, hasta el ser humano más hermoso en
esta faz de la Tierra, todos tenemos la misma Divinidad, todos viviendo su
propio sueño según su nivel de consciencia, y todos estamos cohesionados en uno
solo, en un Dios.
He lanzado la pregunta, los dioses están inquietos y Zeus esquiva mi mirada…
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